Es un patrón de herencia en el cual ambos padres tienen que ser portadores del gen para la enfermedad para tener un hijo con la condición. Incluso cuando ambos padres son portadores del trastorno, solo existe una posibilidad de 1 en 4 de que el niño herede la enfermedad, una posibilidad de 1: 2 de que el niño también sea portador de la misma enfermedad y una posibilidad de 1: 4 de que el niño ni sea portador de la gen para la enfermedad, ni esté afectado con la condición. Esta fórmula se aplica igualmente en todos y cada uno de los embarazos.